24.5.11

La lectora a la vera del lago


Cansada del aire espeso que recubre la mayor parte de la ciudad, la lectora se hace una escapada a uno de los lagos de Palermo. Recorre el bosque que lo circunda y encuentra el lugar ideal para sentarse. Extiende la lona al lado un árbol y prepara el mate.
Mientras la yerba se hincha, se recuesta sobre el tronco y mira el paisaje. La temperatura es de lo más agradable y una suave brisa acaricia su piel.
Ahora sí, llegó el momento. El mate está listo. Toma el primero, abre el libro, y se pierde en sus palabras, cobijada por un poco de naturaleza.





También en: Los martes miento (revista virtual semanal).

4 comentarios:

GL dijo...

Que más se puede pedir? Me gustó esa foto casi fantástica y los matecitos que convida el texto. Saluditos!

Cookie / Cat dijo...

Casi tropical la vista, es de este otoño???

Anahí Flores dijo...

Los escritos vuelan: ¡sí, matecitos dulces!

Cat: la foto fue hecha en marzo, creo que unos días antes de que comenzara oficialmente el otoño.

¡besos a las dos!

Eme dijo...

mate y lectura! lo mejor!