5.8.14

La lectora y la gripe




Como gran parte de la ciudad, la lectora está engripada. Los ataques de tos imponen un ritmo propio en la lectura: no siempre coinciden con el final de un párrafo. Lo mejor de la gripe, piensa la lectora mientras se suena la nariz, es tener una buena razón para pasar el día en la cama o el puf, rodeada de libros, almohadones y pañuelitos de papel. Lo peor, sigue pensando, es que a medida que avanzan las páginas avanza, también, la temperatura en el termómetro.

6 comentarios:

Gabriela dijo...

Que te mejores Lectora
(que linda manta)

Anahí Flores dijo...

Gracias, Gabi, ¡en eso estoy! Besote (de lejos, suerte que por aquí no se contagia...)

Anahí Flores dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Betina Z dijo...

Sí, es un poco paradójico... Por un lado nos sentimos habilitadas a estar tiradas en la cama leyendo, y por otro nos sentimos tan apachuchadas que no nos dan ganas ni de eso...

Que te mejores pronto! (al menos, lo indispensable para seguir leyendo :0)

Anahí Flores dijo...

Betina Z, por suerte no llegué a ese estado :-)
Y siempre pude seguir leyendoescribiendo.
Besitos!!!

Betina Z dijo...

Menos mal, me alegro!

Besos!